Se acabaron los tiempos muertos


Ni tendrémos más prórrogas de las que te dejan el corazón en un puño porque te juegas la vida en la cancha… y es que la vida la hemos perdido. ¿Culpables? Hay miles de versiones, pues unos dicen que se conocen, otros que nunca lo sabremos, pero lo que es claro es que las víctimas son siempre las mismas: la institución y la afición.

Ahora entiendo los comentarios de mis antecesores cuando hablan del Calpisa y otros tantos que hubieran podido ser y no fueron. Nos han arrancado una magia que sólo podemos entender los que hemos estado tantos años en ese pabellón. Hemos vivido tanto o más que lo que ofrece el deporte Rey, pero claro… es minoría, qué importa.

Siempre Lucentum
Siempre Lucentum
Anuncio publicitario

Ruinas en el Golf


Puede que me gane unos cuantos enemigos con lo que voy a decir, pero me da igual. Y es que nunca le he encontrado sentido a eso de la «cultura del botellón» (dos términos que estando en la misma frase queda igual que si te pones una falda rosa fluorescente con una camiseta verde primavera), a la que he ido en dos ocasiones durante mi juventud y, por muy tópico que parezca, no he consumido lo que me ofrecían. Pero es «una cosa» que desgraciadamente está ahí y tenemos que sufrir todo lo que ello conlleva porque «otros lo consideran una forma de hacer vida social».
Al ritmo que vamos, dentro de nada encontraremos bajo tierra otro tipo de «restos» (y no arqueológicos precisamente) cerca de la Albufereta…

Oh! Un brick de Don Simón del 96!!
Oh! Un brick de Don Simón del 96!!

Hércules C.F.: El temazo del verano


Independientemente de que sea verdad o no, de que sea correcto o no, opino que, al menos, un simple comunicado que diga: «no haremos declaraciones al respecto» es necesario, pues es inevitable pensar aquello de «quien calla, otorga»… y los herculanos no pasamos un verano tranquilo desde hace años…

¿Personal de mantenimiento, por favor...?
¿Personal de mantenimiento, por favor…?

Una molestia llamada «Lucentum»


Pero «vamoraver»… desde luego… ¿cómo se nos ocurre, a un pueblo playero, Alicante, tener un equipo de baloncesto que trabaje y consiga, por méritos propios, jugar en ACB, clasificarse para un play-off de ascenso por el título y jugar en Europa y volver a subir a la máxima categoría del baloncesto español, después de un descenso en los despachos? ¿Cómó osamos hacerle sombra el equipo de basket todopoderoso y magnífico de «tots els valensians», el único que es digno en esta «La Nostra Comunitat» de pasear «nuestro» nombre por las principales canchas de España y Europa… Un poquito de por favor… Menos mal que el Consell ya he a puesto remedio al asunto.

"Cualquier cancha de San Blas para jugar os sobra"
«Cualquier cancha de San Blas para jugar os sobra»